Este artículo es simplemente una lista de consideraciones y preguntas para discutir con un candidato para ser el pastor de tu iglesia.
Su Relación con Dios.
1. Muchos dicen que conocen a Dios, pero ni son salvos. ¿Qué evidencias puedes presentarnos que eres nacido de nuevo? Relátanos tu experiencia de ser salvo.
2. Aparte de tu testimonio de salvación, ¿Qué fruto espiritual en tu vida indica y te da a ti la seguranza que eres salvo?
3. ¿En que forma amas a Dios? Explica qué es el verdadero amor de la Biblia, y cómo es diferente del amor que el mundo tiene. Dános ejemplos de cómo amas a tu esposa, a tus hijos, y a otros hermanos en Cristo.
4. Relátanos tus entendimientos y costumbres sobre oración personal, estudio de la Biblia, meditación, mayordomía, crecimiento personal para pastores, etcétera.
5. ¿Cómo describes o imaginas un pastor con éxito?
Este artículo es tomado en parte de «55 Questions for a Prospective Pastor» (55 Preguntas para un Pastor Prospecto).
Tal vez lo más importante de los asuntos para el nuevo pastor de tu iglesia es como es su relación con Dios. A la verdad este punto va a decidir todo en su ministerio con la iglesia y con los miembros. Si vas ligeramente sobre ello, la iglesia va a pagar muy caro con tal vez un pastor malo.
Más Artículos sobre el Pastor Requisitos
Moody La oración que prevalece es una examinación sobre la oración, gente estelar de oración, y cómo cada cristiano de practicar intensivamente la oración.
Extracto: Jesús, como Hombre de Oración
Quiero llamar la atención del lector de modo especial sobre Cristo como un ejemplo para nosotros en todas las cosas, pero de un modo especial en la oración. Leemos que Cristo oraba al Padre por todo. Toda gran crisis de su vida fue precedida por la oración. Dejadme citar unos pocos pasajes. Nunca noté hasta hace unos pocos años que Cristo estaba orando en su bautismo. Mientras oraba, los cielos se abrieron, y el Espíritu Santo descendió sobre Él. Otro gran acontecimiento de su vida fue la Transfiguración. «Y entretanto que oraba, la apariencia de su rostro se hizo otra, y su vestido blanco y resplandeciente» (Lucas 9:29).
Leer/Descargar el libro: Moody La oración que prevalece.